martes, 17 de junio de 2025

Palacio de la Mosquera en Arenas de San Pedro

 Hoy me he ido fuera de Madrid para mostraros el Palacio de la Mosquera, en Arenas de San Pedro. Uno de los palacios que debemos al Infante D. Luís de Borbón, hijo varón más pequeño de Felipe V y su segunda mujer, Isabel de Farnesio. He querido continuar la labor de este infante, tan importante para Madrid y su historia, y de uno de cuyos palacios, el de Boadilla ya hablamos en esta entrada que os recomiendo del blog http://madridconencanto-siema.blogspot.com/2013/06/el-palacio-del-infante-d-luis-en.html . D. Luís de Borbón se enfrentó a las consecuencias de la Pragmática Sanción de de Carlos III en 1776 y, a raíz de su matrimonio desigual con Mª Teresa Vallabriga, tuvo que vivir desterrado de la corte. La boda se había celebrado con pocos invitados y ningún tipo de pompa en la capilla de los Duques de Fernandina  del palacio de Olías del Rey (27 de junio de 1776). Luego pasarían  a vivir en el palacio de los Villena en la localidad de Cadalso de los Vidrios (donde nació su hijo mayor, Luís). De allí llegarían a Arenas de San Pedro en 1778. El Infante eligió este lugar por las mismas motivaciones que le llevaron a elegir Boadilla para una de sus residencias: el gusto por la caza y el contacto con la naturaleza. Mientras acondicionaba una futura residencia amplia y con lujo para él y su familia, estuvieron viviendo en diferentes casas por el pueblo de Arenas de San Pedro. La primera en la que se alojaron fue la casa Lletget. Luego mandó ampliar el viejo palacio en la calle de la Triste Condesa, construyendo el palacio de las Damas (frente a la Fuente de la Regalada), pero que tampoco cubría sus necesidades. Necesitaba una residencia de gran tamaño, ya que viajaba con toda una corte con él. Por ejemplo, a Arenas de San Pedro, le acompañaron, además de su familia, el confesor fray Urbano de los Arcos, el médico Juan Casas, el cirujano sangrador Juan Antonio Rayón, el boticario Gregorio Pérez del Olmo; Diego Lleget que era el sotoayudante de la furriera. El doctor Miguel Ramón y Linacuo ejercía como bibliotecario y preceptor del hijo mayor. También contaba con maestro para los bailes y los músicos Boccherini y los Font; así como restauradores, pintores, conservadores de sus diferentes colecciones y gabinetes; Santos García como peluquero de Damas, el presbítero Juan Moreda. A este listado habría que añadir los numerosos criados para cocina, limpieza, repostería y cuidado de utensilios de la pesca y la caza en la zona.

                                                      Infante Don Luis por Mengs, en 1775

Palacio Villena en Cadalso de los Vidrios (SIEMA Matritensis)


Vista de la Sierra de Gredos desde el castillo en Arenas de San Pedro 
(SIEMA Matritensis)

Confió de nuevo en el arquitecto y amigo Ventura Rodriguez para la construcción de un nuevo palacio en Arenas de San Pedro. Eligió los altos de la Mosquera, desde donde había excelentes vistas a la sierra de Gredos, por un lado, y al pueblo desde la fachada y terraza principal. Todo él inmerso en la naturaleza, como le pasó también con el de Boadilla. Hacía 1779 Ventura se encontraba abrumado de trabajos en la corte, además, había fallecido su mujer en 1776. Ir hasta Arenas con los malos caminos de entonces le causaba muchas molestias. Así que aunque Ventura diseñó el palacio, decidió dejar las obras del mismo a cargo de hombres de confianza de su equipo, como Mateo Guill, que ya tenía mucha experiencia como delineante en las obras del palacio real y del jardín Botánico de Madrid. Y que adelantó mucho los trabajos. Ventura pidió permiso para retirarse de esas obras y que continuaran las mismas los hermanos catalanes Ignacio y Domingo Thomás. También trabajó aquí Alfonso Regalado Rodríguez, que había trabajado como aparejador con el infante en las obras del palacio de Boadilla. El palacio estaba, como he indicado, en la parte más alta de Arenas (a 525 metros de altitud). Disponía en su origen grandes terrenos alrededor para situar los jardines, huertos y animales, siguiendo lo experimentado ya en Boadilla.

Vista general de la Fachada principal, que da al pueblo (SIEMA Matritensis)

                       Pórtico  entrada (SIEMA Matritensis)

Profundidad del pórtico clásico de entrada, sobre el que se asienta la terraza 
principal del piso noble (SIEMA Matritensis)

Edificio rectangular de tres plantas, construido en mampostería, con granito en el pórtico, extremos y algunos remates de las ventanas. La longitud de fachada proyectada era inicialmente de 72 metros, pero quedó incompleta y sólo se construyeron 44 metros, los de la derecha con el pórtico central. Con plomo cubrieron el chapitel de la capilla, los canalones y tejados. Se organizaban los espacios en torno a patios con una fuente. De los cuatro torreones sólo se construyeron dos. Ya a fines de 1783 D. Luis estaba viviendo en este ala derecha terminada. Exteriormente vemos en la planta baja unos grandes ventanales y el pórtico. Éste está inspirado en arcos de triunfo, recorrido por columnas clásicas toscanas y entablamento, con arco central y dinteles rectos a los lados. Todo el interior es abovedado. En el piso primero, el principal, las ventanas llevan molduras de granito neoclásicas alrededor, excepto el salón principal sobre el pórtico, en el que alternan diversos remates, siendo semicircular el central. El proyecto inicial llevaba un parterre sobre la propia terraza del pórtico, como se aprecia en los planos de Domingo Thomás. La segunda planta, para el servicio, tenía 15 ventanas mucho más pequeñas y cuadradas.
            Plano de la fachada principal, de Ignacio Thomás, donde se remata el cuerpo central con frontón triangular y las armas del infante D. Luis (SIEMA Matritensis)

Sección del palacio, donde se aprecia la cubierta de la capilla, por Thomás 
(SIEMA Matritensis)

Curiosos jardines con diseño de parterre estético pensados para la gran terraza,
de Thomás. Os pido perdón por los reflejos en las fotos de los planos (SIEMA Matritensis)

Lateral del palacio, donde se aprecian mejor las dos torres que recuerdan también 
al palacio de Boadilla (SIEMA Matritensis)

Detalle de las molduras neoclásicas de granito en las ventanas (SIEMA Matritensis)


Zonas inacabadas donde se ve el uso de ladrillo y mampostería (SIEMA Matritensis)


Zona no acabada desde el mismo lateral junto a la casa de Oficios (SIEMA Matritensis)


La distribución interior del palacio es diferente al de Boadilla, que interiormente seguía unos espacios más barrocos. Aquí es puro neoclasicismo todo. La planta baja, con 2.041 metros, nos introduce en un gran zaguán del que parten salas importantes para el infante y que estaban colocadas en esta planta baja, no en la primera como en Boadilla. Por ejemplo, los gabinetes de historia natural y de pinturas que se trajo de Boadilla, la biblioteca y la sala de tapices. También las grandes puertas de madera con hierro son originales. Ese zaguán están dividido en tres tramos por cuatro pilares de granito que sujetan las bóvedas. El pórtico y, después, el zaguán con la escalera, le aportan un aire muy pomposo y señorial al interior del palacio.


Zaguán o hall de entrada con los grandes pilares de granito (SIEMA Matritensis)

Hornacina de granito para colocar esculturas en el zaguán (SIEMA Matritensis)

Puertas originales del zaguán con sus trabajos en hierro (SIEMA Matritensis)

Subimos a la planta noble a través de una escalera imperial (con un tramo que luego se dividirá en dos tramos laterales) con peldaños y balaustrada de granito. Las estancias del Infante D Luis y su mujer daban a la zona Sur. Estas habitaciones de la planta primera presentaban unos techos enormes, de 7 metros de altura que, incluso, se puede apreciar desde el exterior. La cámara del Infante D. Luis se abría a la capilla u oratorio (de planta circular y coronado por cúpula con linterna). Desde una pequeña habitación junto a esa capilla le permitía escuchar Misa a diario. Aquí presenta muchas diferencias con el palacio de Boadilla, ya que en Arenas la capilla está en el piso superior y en Boadilla se accede directamente desde la calle o desde el hall, en la planta baja. La de Boadilla sigue el estilo barroco cortesano, muy decorada y dinámica. Sin embargo, esta de Arenas es mucho más pequeña y sigue el estilo puro neoclásico, en la decoración de paredes también. Junto a la alcoba del Infante un pequeño retrete habitual. Disponía de un aguamanil, un espejo y unas molduras de madera doradas para sujetar las colgaduras de damasco. Las habitaciones de la mujer daban al otro lado. La decoración ideada por Ventura Rodríguez no se llegó a concluir. Aunque el palacio original iba revestido de color rosaceo, interiormente se siguieron colores verde pálido, amarillos y rojos pompeyanos, que aún se pueden ver en algún zócalo. Zócalos y puertas de madera. Diseños pompeyanos, o neoclásicos de inspiración inglesa. Entre los muebles encontramos algunos diseñados por Ventura Rodríguez en 1783 donde se aprecia una mezcla, pues hay rococó francés, pero también gusto clásico italiano. Otros muebles fueron importados directamente desde Londres. Los frescos también se inspiraron en el mundo clásico.

                                      Arranque de la escalera desde el zaguán (SIEMA Matritensis)

División de la escalera en dos ramales (SIEMA Matritensis)

Balaustrada de granito clásica (SIEMA Matritensis)

Detalles de las molduras y pilastras corintias al terminar la escalera y pasar a un corredor
en la planta primera (SIEMA Matritensis)


Plano de la distribución de la planta baja del palacio de Arenas, por Ignacio Thomás, 1779
(SIEMA Matritensis9

El ala principal de la parte noble correspondía a las diversas habitaciones de uso para el Infante D Luis, así como el salón y comedor principal u el oratorio. Éste es de planta ovalada, cubierto con cúpula y linterna y con decoración en estuco neoclásica. Está muy deteriorado, como gran parte del palacio, que necesita una gran restauración. La puerta de la izquierda del mismo comunicaba con las estancias del Infante, que eran las que mejores vistas a la naturaleza tenían. Todavía se conservan los zócalos y puertas de madera original y las chimeneas, así como los elevados techos. Muchas de las salas de esta planta noble se han restaurado para uso cultural, como salas de exposiciones o algún evento del Ayuntamiento de Arenas. Desde las ventanas del interior se pueden ver los pequeños patios cuadrados


  Vista general del oratorio ovalado, con separación de columnas corintias pareadas entre los huecos y cubierta de cúpula con linterna, que se aprecia también al exterior (SIEMA Matritensis)

Detalle de la cubierta del oratorio con su decoración (SIEMA Matritensis)

Puerta que comunicaba con el ala del infante al oratorio
(SIEMA Matritensis)

              Proyecto de revestimientos que llevaba el oratorio del palacio (SIEMA Matritensis)


Chimeneas de mármol en estilo neoclásico (SIEMA Matritensis)

Zócalos y puertas de madera en la parte noble (SIEMA Matritensis)

Sala alargada en la parte noble que actualmente se restauró con uso cultural 
(SIEMA Matritensis)

         Gran terraza sobre el pórtico con salida desde la que fue ala del infante (SIEMA Matritensis)

Unas escaleras de servicio, más modestas y con barandilla de hierro, conducen a la segunda planta. Aquí los cuartos son más pequeños y los techos más bajos. Se usaban para la servidumbre. En el sótano destacan la zona de cocinas, almacenes, bodega, etc. Llama la atención lo bien conservada que está la cocina, con los hornos, campana, fregadero, maderas para colgar carnes de caza o verduras. 

Tramo de escaleras de servicio (SIEMA Matritensis)

Esquina de uno de los patios interiores (SIEMA Matritensis)


                      Horno y campana de la cocina para los fuegos (SIEMA Matritensis)

Pilas de la cocina (SIEMA Matritensis)

Restos de zócalos con pinturas originales en amarillos y rojos (SIEMA Matritensis)

En cuanto a los Jardines decir que es la parte más difícil de mantener y recuperar del palacio. Los más cercanos a los muros del mismo eran los más bonitos y que desarrollaban el plano estético según el proyecto que firmó Ventura Rodríguez el 24 de mayo de 1782. La misma idea había desarrollado Ventura en el palacio de Boadilla, poniendo las fuentes y el plano estético con flores y parterres en la zona alrededor del palacio, y dejando las terrazas con huertos y árboles frutales o campo para animales y gallinero en las zonas más alejadas. Así que la Fuente llamada de los Delfines estaba junto al muro de contención de la fachada principal del palacio. Al Norte puso parterres en torno a fuentes bajas de granito de planta circular. Plantarían también tulipanes y flores muy vistosas y olorosas, así como rosales. Los jardines contenían miles de árboles frutales (almendros, melocotoneros, perales, cerezos, nogales, viñedos, manzanos) e invernaderos. Tenía hortelanos especialistas en su cuidado, como Luis Sánchez Espina. D. Luís era un príncipe ilustrado, muy curioso y amante de la naturaleza. Los trabajaba aplicando las últimas técnicas científicas. Eran para su uso privado. Sabemos que cuando murió el Infante D. Luís y su viuda permaneció en Arenas, mandaba a su hijos en Toledo productos ricos desde el  palacio de Arenas, como por ejemplo melocotones y peras. Hoy en día no nos podemos hacer una idea de la belleza que tuvieron estos jardines. La reconstrucción que se ha pensado para los mismo dista mucho de lo que fueron originalmente. 

Restos de las fuentes bajas redondas y pequeños parterres en el lateral (SIEMA Matritensis)

Vista desde la terraza del jardín principal y la villa (SIEMA Matritensis)

Jardines con arbolado y árboles frutales en la primera terraza (SIEMA Matritensis)

Más zona de jardines de uso agrícola y, al fondo, la subida a la segunda terraza, 
donde estaba el invernadero (SIEMA Matritensis)

A la izquierda de la entrada principal del palacio, hacia el lado Oeste,  se aprecia la gran casa de oficios. Separada del mismo por un muro de mampostería. Presenta un jardín alrededor. Se articula en torno a un patio interior con trece cámaras. Desde el palacio viejo de Arenas se divisan muy bien, tanto la casa de oficios, como el lateral del palacio, con los muros inacabados. 

Vista de la casa de oficios junto al palacio (SIEMA Matritensis)

Desde el muro que separa el palacio, otra de las vistas de la casa de oficios (SIEMA Matritensis)

                     Vista de la casa de oficios y el palacio desde el castillo o palacio viejo de Arenas
                                                        (SIEMA Matritensis)

El Infante D Luis fue un verdadero mecenas de las artes, no sólo de la música o las ciencias naturales, sino también de la pintura. Descubrió el talento de Paret primeramente, ahora en Arenas, como había fallecido en 1776 el pintor de cámara, Francisco Sasso, y no lo pudieron sustituir por Mengs, Paret o Gregorio Ferro (como hubiera deseado el infante en un primer momento), recurrió a Goya. Quizás aconsejado por Ventura - compañero de la Academia de Goya y gran conocedor de los gustos del infante- o su propia mujer, aragonesa como el pintor. Goya pasó en Arenas de San Pedro los veranos de 1783 y 1784, para realizar retratos a la familia. Pero también entabló gran amistad con el infante, de quien admiraba su sencillez, bondad y cercanía. En una carta de Goya a su amigo Zapater (el 20 de sept de 1783. Ed Istmo 2003) llega a decir "Acabo de llegar a Arenas muy cansado. Su Alteza me ha hecho mil honores, he hecho su retrato, el de su señora, niño y niña con un aplauso inesperado (...)He salido dos bazas a caza con su Alteza y tira muy bien y la última tarde me dijo sobre tirar a un conejo: ese pintamonas aún es más aficionado que yo. He estado un mes continuamente con estos señores y son unos ángeles. Me han regalado mil duros y una bata para mi mujer toda de plata y oro". El apoyo que dieron a Goya supondrá el ascenso del pintor como retratista de la aristocracia madrileña y de la corte. Una vez fallecido D. Luís, los Duques de Osuna serán los nuevos mecenas de Goya. El pintor siguió manteniendo una gran amistad con los hijos de D Luís de por vida. Siguió retratándoles de mayores, como cuando recuperan el apellido Borbón con Carlos IV, o cuando Mª Teresa está embarazada. En el salón principal del palacio de Arenas, cuelgan copias de estos cuadros de Goya.

               Salón principal con la pareja de retratos del infante D Luís y su mujer realizados      
        por Goya en 1783. El de ella se conserva en el museo del Prado (SIEMA Matritensis)

Infante D Luís de Borbón (Colección Sueca)

La familia del Infante D Luís por Goya, 1784 ( Fundación Magnani Roca, Parma)

Maria Teresa en el jardín, Goya, 1783 . Seguramente la terraza de Arenas, con los
 fondos de Gredos detrás (National Gallery Art Washington)

Mª Luisa de Borbón, duquesa de San Fernando, Goya en 1800 (Gallería degli Uffizi)


Cardenal Infante Don Luis de Borbón y Vallábriga, Goya en  1800 (Museo del Prado)


La estancia de Don Luis en Arenas le llevo a sufrir mucho. Él se adaptaba a todo y le encantaba vivir rodeado de la naturaleza. Además, el rey Carlos III le permitía salir del palacio de la Mosquera y venir a la corte en algunas ocasiones festivas, como cumpleaños o santos del monarca, nacimientos de infantes, bautizos o bodas. Don Luis ocupaba un lugar importante en el protocolo, pero tenía que acudir siempre solo, sin estar acompañado por María Teresa. Su mujer se aburría enormemente en Arenas y, la diferencia de edad y de carácter entre ambos, causaba ciertas tensiones. Su hermano Carlos III no era una persona fría, sino que tenía un gran corazón y mucha amistad con D Luís. Todo lo sucedido con la pragmática, la boda del infante y su alejamiento de la corte lo llevó siempre como un asunto "doloroso y espina que le atravesaba el corazón", según sus propias palabras a Tanucci en una carta del 16 de julio de 1776. 

M ª Teresa Vallábriga, por Goya, también pintada en Arenas

El Infante Don Luis falleció en Arenas de San Pedro el 7 de agosto de 1785. El rey Carlos no permitió a su mujer salir de Arenas, pero a sus hijos los llevo a que se educaran a Toledo. Mª Teresa sólo conseguiría  permiso de libre residencia en 1792. El Palacio quedó bastante abandonado con el devenir de la historia. En 1809 fue cuartel de las tropas francesas. En 1913 los Rúspoli lo vendieron a un arenero. Ha pasado por varios usos, como hotel, seminario, colegio de San José (desde 1976-1981). Para lo cual adaptaron las diferentes estancias. En 1989 lo adquirió el Ayuntamiento de Arenas. Espero que consigan fondos de la Unión Europea y de inversores privados para la gran restauración que necesitan y con un arquitecto que sea fiel a la arquitectura histórica, así como buenos paisajistas. Mucha de la información que suministro la cogí del libro "El Rey perdido. D. Luís de Borbón, figura clave de Madrid y Boadilla" ( Maribel Piqueras, Ed Opera Prima, 2016). Agradezco a la familia Rúspoli lo que me ayudó en su momento, así como a protocolo de Arenas de San Pedro que me permitiera recorrer las estancias del palacio, incluso las más escondidas, con motivo de la celebración del hermanamiento entre Arenas y Boadilla celebrado el 30 de mayo del 2025. Creo que ha merecido la pena escaparme un poco fuera de Madrid, para continuar la historia del infante D. Luís. 

Maribel Piqueras 


Maqueta en el hall del palacio (SIEMA Matritensis)








viernes, 23 de mayo de 2025

Plaza de la Cruz Verde

 Una de las plazas del Madrid de los Austrias donde se respira un ambiente tranquilo, así como muchas historias escondidas en ella, es la conocida como Plaza de la Cruz Verde. Es una plaza irregular, abierta a lo que fue el antiguo arroyo de San Pedro -hoy Cuesta de Segovia-. El nombre tiene que ver con la historia de la Inquisición en Madrid, ya que la cruz verde era el blasón de la Inquisición (cruz verde con un ramo de olivo a la derecha y una espada a la izquierda). Esa cruz de madera solía salir en procesión la víspera del auto de fe desde el Tribunal, pasando por delante de los calabozos de los reos, hasta donde se celebrase el auto de fe. En la procesión iban "familiares", notarios, gente del Santo Oficio y representantes del clero. La cruz quedaba cubierta con un velo negro y velada por las monjas Bernardas del Santísimo Sacramento hasta que se dictase sentencia. Mesonero Romanos también hace mención a esa cruz verde de madera situada en los muros del convento. Ya que en esta plazuela se celebraron autos de fe en el s XVII. 

                                       Cartel de la plaza de la Cruz Verde  (SIEMA Matritensis)

El muro tras la fuente es donde daban los muros del antiguo convento de las Bernardas del Santísimo Sacramento, fundado junto a la iglesia del Santísimo Sacramento en 1615. El Duque de Uceda dispuso tener un palacio y convento anexo a imitación del Palacio de los Austrias con el convento de la Encarnación. Hoy en día queda la iglesia barroca del Santísimo Sacramento ( arzobispal castrense), pero el convento se rehabilitó en el s XVIII, por el arquitecto Pedro Hernández siguiendo modelos neoclásicos. Esa reforma de 1725, como se aprecia en el plano de Espinosa que os pongo a continuación, dejó el jardín rectangular, con un eje central en cruz y la fuente baja en el centro. Además de cuatro divisiones con recortes de boj y árboles variados. En 1830, las casas conventuales fueron compradas por la familia Lezcano, quienes encargaron la reforma al arquitecto Joaquín Roldán Pascual. Este arquitecto tuvo el acierto de recrear el huerto de las monjas, añadir la fuente actual y una farola. Aurora Lezcano se casó con el marqués de O´Reilly en 1936, por eso el nombre actual del palacete. Se vendieron otra vez en 1944 y en 1976 vino la gran remodelación, cogiendo parte el ayuntamiento y parte como solar para viviendas privadas. Por eso la calle se llama Sacramento. De la gran huerta que tuvieron las monjas se conserva un pequeño jardín integrado en la parte de atrás de las viviendas, tras el muro que da a la plaza de la Cruz Verde. Conocido popularmente como jardín de las monjas o de la priora, es uno de los jardines escondidos de nuestro Madrid. Al lado del solado y recortes de boj junto a algún arbolado, encontramos restos de muros barrocos junto al que fue palacio Lezcano, se dispone una fuente de bronce con cuatro puttis y caminos a su lado. Es conocida como la "fuente de la priora". Fue propiedad de los Duques de Montellano y estuvo colocada en su palacio de la Castellana, de donde pasaría a los almacenes municipales.

                      Plano de Espinosa donde se aprecia el jardín de las monjas, que prácticamente tiene 
                      el diseño actual, pero con más vegetación (SIEMA Matritensis)


                      Vista del jardín de las monjas en la parte de atrás de la plaza de la Cruz Verde
                                                    (SIEMA Matritensis)

Detalle de la Fuente de la Priora en bronce (SIEMA Matritensis)

Al fondo el muro de las Bernardas que da sobre la plaza de la Cruz Verde 
(SIEMA Matritensis)

Restos de muros antiguos en el jardín de las monjas (SIEMA Matritensis)

Farola de la puerta del Sol que se trajo aquí en una de las remodelaciones, 
junto a la fuente (SIEMA Matritensis)

Otro elemento fundamental de la plaza de la Cruz Verde es la Fuente. Conocida como Fuente de la Cruz Verde, se dispone siguiendo el modelo de caños de pared que hubo en esa plaza siempre. La mandó hacer el marqués de Santa Cruz y se inauguró el 4 de octubre de 1850. Consta de diversos elementos traídos de otros sitios y dispuestos aquí por el arquitecto Martín López Aguado. El marqués de Sta. Cruz mandó suprimir la fuente de Puerta Cerrada, de donde proviene la escultura en mármol de Diana cazadora que está en la parte superior de la fuente. La Diana la esculpió Ludovico Turqui en 1620. Está colocada sobre dos delfines, pero ha perdido algún elemento original como el arco con flechas. Una placa en la parte central nos muestra la leyenda " Siendo corregidor el Exmo Marqués de Santa Cruz, año 1850". La fuente consta de cinco caños en la fachada frontal y uno en cada lado lateral, Separados por muros de ladrillo y pilares de piedra caliza, con pilón de granito. En la parte central vemos dos pilares más grandes rematados por una decoración de piñas. Esta fuente era una de las más concurridas por los aguadores de Madrid, aglutinando a 144 aguadores. Admiraban la gran cantidad de agua que se podía almacenar en su depósito ( situado en alto, bajo el jardín de las monjas). 1500 cubas procedentes del arroyo Abroñigal. El tumulto de aguadores con tinajas, burros o carros cargados era habitual en la plaza. 

Vista de la Fuente de la plaza de la Cruz Verde (SIEMA Matritensis)

Detalle de la Diana cazadora, mármol s XVII, procedente de la fuente de 
Puerta Cerrada (SIEMA Matritensis)


La casa de esquina perteneció en el s XVIII a Sebastián de Flores, maestro herrero de la casa real, con cuya hija, Josefa, estuvo casado el arquitecto Ventura Rodríguez, a quien le permitieron poseer la mitad de la vivienda. Aunque posteriormente se mudaría a otras en Madrid. En frente de esa casa, el 6 de febrero de 1992, hubo un atentado de ETA por el que fallecieron cuatro militares y un civil. Una placa en la fachada rinde homenaje a las víctimas. También el la restauración de las puertas y ventanas que se destruyeron, dejaron restos de metralla que todavía hoy en día nos recuerdan esas historias trágicas en Madrid. 

Viviendas reformadas en el s XVIII, sobre caserío anterior del s XVII, y compradas 
por Sebastián Flores, suegro de Ventura Rodríguez (SIEMA Matritensis)

Restos de metralla de ETA en esta típica puerta de granito del Madrid Austria 
(SIEMA Matritensis)

Placa que recuerda las víctimas del atentado de ETA en este lugar 
(SIEMA Matritensis)

El entorno de la plaza de la Cruz Verde tiene mucho encanto. Por uno de los lados se divisan unas escaleras por callejones del Madrid Austria, la calle del Rollo. Frente a ella, al otro lado de la Cuesta de Segovia, se divisa el jardín colgante del palacio del príncipe de Anglona. Con estas últimas imágenes me despido. Espero haberte descubierto una plaza con encanto de nuestro viejo Madrid.

Maribel Piqueras

Subida de la plaza de la Cruz Verde por la calle del Rollo y caserío Austria
(SIEMA Matritensis)

Vista del jardín colgante del Príncipe de Anglona y subida a la plaza de la Paja, 
justo en frente de la plaza de la Cruz Verde (SIEMA Matritensis)