martes, 24 de enero de 2017

Hospital de la Venerable Orden Tercera



Desde Madrid con Encanto hemos entrado hoy a curiosear el hospital más antiguo de Madrid, vigente como hospital desde el sXVII hasta nuestros días. Ven a descubrir su apasionante historia y conoce esta joya de nuestro patrimonio a través de estas letras. Cuando de lejos aparece su fachada y pérfil alargado se puede leer en un cartel "Hospital de la VOT". Pero ¿qué es eso de la VOT?. Con esas siglas se conoce a la rama seglar, que en el estado laical sigue el carisma del fundador de la orden que, en este caso, es la Venerable Orden Tercera de San Francisco. La mayoría de las órdenes religiosas comprenden también una rama seglar, con lo cual encontramos una VOT en el Carmelo, en los Agustinos, Mercedarios, Trinitarios, etc.... La VOT franciscana fue fundada en vida de San Francisco, quien tomó la profesión de sus primeros seguidores, el beato Luquesio y su esposa. Ha habido reyes, papas, políticos conocidos que pertenecían a esta orden, como Sta. Isabel de Hungría, San Luís rey de Francia o el Papa Juan XXIII. En el Madrid de los Austrias este movimiento tuvo muchísima importancia, pertenecía a él más del 20 % de los madrileños durante los s XVII y XVIII. La primera acta de reunión que se conserva de esta fraternidad es de 1609.
Vista lateral de la iglesia del hospital, con la torre de la cúpula
y la espadaña (Foto SIEMA)

Una vez terminada la construcción de la Capilla del Cristo de la VOT franciscana, junto a la Basílica actual de San Francisco, se ve la necesidad de tener un hospital para atender a los hermanos laicos pobres. Se inician las obras en 1679 y se terminan en 1697 sobre los solares de las casas del magistrado D. Gil Imán de la Mota en la actual calle San Bernabé. Los mismos arquitectos de la capilla del Cristo, Marcos López y Felipe Sánchez, trabajaron aquí, pero se van sucediendo diversos arquitectos y maestros de obras en el tiempo. A Marcos López le sustituyó Luis Román y sus hijos, Diego y Matías. El hospital como tal se inauguró en 1686, sin estar terminadas todas las obras de la iglesia. Se organiza en torno a un patio de planta cuadrada con galerías en los dos pisos, con estructura de granito, madera y ladrillo. Mediante unas escaleras de granito en las esquinas se puede acceder al jardín interior del patio.

Patio del Hospital (Foto SIEMA)

Una sencilla puerta del s XVII con molduras barrocas de piedra nos da la bienvenida al hospital. En una de las hojas de la puerta, está escrito en el herraje la fecha y autor de la misma, Diego Martin Mazón 1677, con decoración floral. La fundadora del hospital es DªLorenza de Cárdenas (hija de los Condes de Puebla Maestre) y su segundo esposo, D. Lorenzo Ramirez de Prado (enterrados ambos bajo el altar de la Capilla del Cristo de la VOT). En el vestíbulo vemos el cuadro médico que está escrito en los antiguos muebles de caoba que pertenecieron a la farmacia. Hoy en día en un hospital que tiene conciertos con todas las sociedades médicas. 

Fachada y puerta de entrada al hospital (Foto SIEMA)

Puerta principal, con frontón semicircular partido
(Foto SIEMA)

Herraje del puerta del hospital, s XVII
(Foto SIEMA)

Directorio en el vestíbulo (Foto SIEMA)
Retrato de Íñigo López de Zárate, anónimo del s XVII
(Foto SIEMA)

Lo más llamativo y, sin duda, más bonito del hospital, es su escalera principal con dos tramos enfrentados, cubierta con bóveda de cañón y decorada con estucos y frescos de Teodoro Ardemáns, cuando éste era aún muy joven, con sólo 19 años. Las pinturas son los símbolos de la VOT de San Francisco. En el nicho de la izquierda vemos una impresionante escultura de Agustín Querol representando el busto de San Francisco, muy expresiva (s. XIX). Sobre ella pinturas de un auténtico museo, como "Desposorios místicos de Sta. Catalína de Alejandría" y "Anunciación" ( 1653). Ambas obras son de Carreño de Miranda, el gran retratista de la época de Carlos II- Este último rey Austria prestó mucho interés al hospital, cuyas obras se finalizan durante su reinado. La obra de Van Dyck "Cristo ante la mujer adúltera" (s XVII) preside la pared de la izquierda que estamos comentando.

Escalera principal del hospital (Foto SIEMA)

Vista de la escalera (Foto SIEMA)

Frescos de Teodoro Ardemans en la escalera
(Foto SIEMA)

Desposorios de Sta Catalina, de Carreño de Miranda
(Foto SIEMA)

Busto de San Francisco, de A. Querol 
(Foto SIEMA)

Al final de la escalera, y antes de llegar al claustro superior, encontramos un busto de mármol de D. Juan José de Austria, obra del flamenco Francisco Dieussart. Representa al único hijo natural reconocido por Felipe IV, hijo de la actriz conocida como "la Calderona". D. Juan José de Austria resultó un importante mecenas  de las artes, que ocupó importantes cargos políticos. A la muerte de su padre, sin embargo, quedó apartado de la corte y murió en el Alcázar bastante olvidado. En la galería superior podemos contemplar obras importantes como "San Miguel Arcángel"(1746, Isidro García), "Los estigmas de San Francisco"(de Vicente Carducho, que era el pintor más importante de la escuela madrileña del s XVII hasta que le desbancó Velázquez), "San Antonio de Padua" (1652, Luis Bonifaz) o el "Retrato del Duque de Abrantes" (1874, Eduardo Balaca).
Busto de D. Juan José de Austria, de 
Dieussart (Foto SIEMA)

Vista general de la galería superior (Foto SIEMA)

Los estigmas de S.Francisco (Vicente Carducho, s XVII)
Foto SIEMA

San Miguel Arcángel, de Isidro García, 1746 (Foto SIEMA)

San Antonio de Padua de Luis Bonifaz, 1652
(Foto SIEMA)

Retrato del Duque de Abrantes, de E. Balaca, 1874
(Foto SIEMA)

Seguimos la visita por el llamado claustro o galería inferior, donde podemos ver obras como la curiosa "Inmaculada con la Santísima Trinidad", del maestro madrileño Francisco Camilo (s.XVIII), en este cuadro Jesús no aparece de adulto, sino como niño pequeño. "S. Lorenzo" de Asenjo (principios s XIX), "Inmaculada con guirnalda de ángeles", de Mateo Cerezo hijo ( s XVII) y una "Virgen con Dios Padre" de Gregorio Ferro, contemporáneo de Goya.

"Inmaculada con la Santísima Trinidad", de Francisco Camilo,
s. XVIII (Foto SIEMA)

"Inmaculada con guirnalda de ángeles"de Mateo Cerezo
(Foto SIEMA)

Virgen con Dios Padre, de Gregorio Ferro, s XVIII
(Foto SIEMA)

Pasillos por la galería inferior, donde se muestra escrito "Laboratorio"
(Foto SIEMA)

Como todo buen hospital también conserva algo de lo que fué la Farmacia del mismo. Una sala alargada que hoy se utiliza para celebrar consejos. Aún se pueden ver símbolos farmaceúticos en estuco, como la copa con la serpiente, o mobiliario de la antigua farmacia con sus botes de los siglos XVII y XVIII. Los más antiguos están hechos en cerámica de Limoges y los del s XVIII tienen la forma cilíndrica. Destaca una buena talla de San Francisco, un tapiz del s XVIII, además del curioso Niño Jesús ataviado con bellos ropajes árabes y sandalias. Este Niño Jesús fue rescatado de Alarache por la VOT de S.Francisco en 1692. Con él jugaban los niños del rey de Mequinez, hasta que una cristiana vió como lo maltrataban y pidió a los franciscanos que lo recuperaran. 

Vista general de la sala que constituía la antigua farmacia
(Foto SIEMA)

Vitrina con botes antiguos (Foto SIEMA)

Recipientes de Limoges junto a los cilíndricos del s XVIII
(Foto SIEMA)

San Francisco y, detrás, los símbolos farmaceúticos en el 
arranque de un arco (Foto SIEMA)

Niño Jesús que estaba en poder del rey de 
Mequinez, en el N de África (Foto SIEMA)

La Capilla del Hospital se terminó de construir mucho más tarde. Su primera adjudicación fue en 1693 al arquitecto José de Arroyo pero, como falleció en 1695, la concluyeron Felipe Sánchez y otros, como Teodoro Ardemáns. Se puede decir que se finalizó en 1699. Conserva su fachada barroca, de una estructura rectangular dividida en tres cuerpos y enmarcada en pilastras cóncavas de orden gigante. Rematada por líneas semicirculares cóncavas en movimiento. Portada clasíca. Sobre la ventana del cuerpo central el escudo franciscano. Es de una sola nave, con pilastras de capitel dórico separando las capillas a base de retablos con lienzos en la pared. Presenta una cornisa sobresaliente y un crucero apenas esbozado, donde se levanta una cúpula con tambor y pechinas (en estas últimas están representados los escudos franciscanos). El retablo mayor es de estuco imitando mármol, lo realizó Patricio Rodriguez, discípulo de Ventura Rodriguez en el s XVIII. Destacan los ángeles de la parte de arriba, que por su calidad algunos críticos atribuyen a José Ginés. Los medallones representan a S. Pedro y San Pablo. Las tallas son de S. Francisco y San Antonio, ambas de 1762 realizadas por Julián San Martín. La Inmaculada del centro es posterior, del s XIX, esculpida en 1867 por Salvador Páramo López. Los arcángeles son obra de Porcel. 

Fachada de la Capilla del Hospital (Foto SIEMA)

Vista general de la capilla (Foto SIEMA)

Cubiertas abovedadas de la iglesia con los lucernarios
(Foto SIEMA)

Cúpula del crucero (Foto SIEMA)

Coro a los piés de la Capilla (Foto SIEMA)

Retablo mayor (Foto SIEMA)

Angeles de Ginés (Foto SIEMA)

En el lado de la derecha hay una talla de S. Isidro Labrador muy buena, del s XVIII. Luego el altar de la Divina Pastora, uno de San Gabriel y, para terminar este lado, el lienzo de la Inmaculada de Pereda. En el lado de la izquierda el retablo de la Muerte de San José con la escultura de la Virgen de Valvanera del s XVIII. El lienzo de la muerte de San José, de 1700, obra de Pedro Ruíz González, representa una iconografía muy poco vista de la muerte de S. José en la cama, rodeado de María y Jesús. A los pies, a la derecha de la pintura, un ángel porta churros como anécdota curiosa. Luego el altar de la Asunción, de Domingo Martínez (s XVIII) y el crucificado de Juan López, del mismo siglo.

Talla de San Isidro, anónima del sXVIII
(Foto SIEMA)

Altar de la Muerte de San José y la Virgen de Valvanera
(Foto SIEMA)

No dejo de admirarme de lo curioso que resulta ver cartelas de consultas, cafetería, médicos hoy en día en un hospital tan antiguo y con tanto patrimonio conservado. Para consultas la entrada está por la parte de la derecha del hospital, con un cuidado jardín y fuente y unas vistas de caserío Austria. Agradecemos de corazón a la VOT franciscana su ayuda en realizar las visitas culturales al hospital y también en las aclaraciones para la realización de esta entrada, especialmente al hermano Antonio Pérez, que tan amablemente accedió a acompañarme y mostrarme la farmacia. Estar atentos a nuestra web www.siema.es o el facebook, porque en febrero y abril realizaremos visitas al hospital para que se apunte libremente quien quiera, o también solicitárnosla como empresas o grupos ( pero en ese caso no se publican). Recuerdo también que se pueden utilizar fotos o texto del blog siempre que se indique su procedencia. 

Fachada del hospital que da al jardin (Foto SIEMA)

Vistas del jardín exterior (Foto SIEMA)

Y ya para terminar nada más añadir un negocio con encanto cercano al Hospital de la VOT, se trata de la pastelería cafetería + que pan. Un horno y pastelería con experiencia, ya que Manuel, su dueño, lleva 22 años en el negocio. Aunque en su ubicación actual, en la Carrera de San Francisco, lleva sólo 4 años. El local se ve que es antiguo, con las altas columnas de hierro fundido del s XIX pintadas de blanco. Muy acogedor para trabajar, desayunar, tomar un café o merendar. Abren de 7 a 20h y se puede comprar un pan de masa madre muy variado, así como estupendos dulces(tartas de todo tipo, brownies, bollería) y cafes. En verano sirven helados. Para que os hagáis una idea del encanto de la cafetería os muestro las siguientes imágenes con las que me despido de vosotros.

Maribel Piqueras

Fachada de la Pastelería Panadería + que Pan
(Foto SIEMA)

Columna decimonónica (Foto SIEMA)

Vista general (Foto SIEMA)

Una de las vitrinas de + que pan (Foto SIEMA)


domingo, 8 de enero de 2017

Basílica de Nra Sra de Atocha

Hoy propongo a los seguidores de Madrid con Encanto ambientarse en la historia y actualidad de la Basílica de Atocha. ¿A qué no sabían que la imagen de la Virgen de Atocha es la más antigua de Madrid? Una talla románica del s VII sería la original, aunque la actual parece más bien de los siglos XII o XIII. Aún así es la imagen mariana más antigua de Madrid. Existen muchas leyendas sobre el origen de la imagen, ya que  se le atribuye su realización a Nicodemo y a San Lucas, para después ser trasladada por discípulos de los apóstoles hasta España. Lo que sí está comprobado es que su devoción es muy antigua y aparece ya en documentos del s. VII. Un ejemplo de ello es cuando San Ildefonso, arzobispo de Toledo (s VII), escribe a un canónigo de Zaragoza que "cuando pasara por Madrid se acordara que en su vega había una devota imagen de Nuestra Señora con el Niño en el brazo izquierdo y una manzana en la mano derecha, llamada Virgen del Atochar". Originariamente la Virgen estaba situada en un atochar junto al puente de Toledo.

Virgen de Atocha (Foto Wikipedia)

El rey Alfonso VI mandó construir una ermita en el lugar donde ahora se levanta la basílica de Atocha. Desde siempre tuvo fama de muy milagrera, no sólo en la lucha contra los musulmanes en Madrid (como la historia del caballero Gracián Ramírez), sino también en otro tipo de milagros que se mencionan. Por ejemplo en las Cántigas de Alfonso X, el Sabio. Este último escribe sobre los milagros de "Nuestra Señora de Tocha" en las cántigas 289 y 315. Su nombre seguramente le viene del tipo de vegetación que había donde se erigió la primera ermita: atochales, que son parecidos al esparto. La talla es pequeña, de unos 60 cms, y no se puede apreciar bien desde los piés del altar. Es de madera oscura, de estilo Theotokos (Madre de Dios con niño, sentada) bizantino. El Niño está bendiciendo con dos dedos de su mano derecha.

Vista general del altar con la imagen de la 
Virgen (Foto SIEMA Matritensis)

En el s. XVI la pequeña ermita se convirtió en un convento a cargo de frailes dominicos. Estuvo muy vinculada tanto a los reyes de la casa de Austria, como a los Borbones, que le ampliaron sus instalaciones y la enriquecieron con donativos. Carlos V tenía un confesor dominico, Fray Hurtado de Mendoza, y favoreció mucho a la Virgen y a esta orden. Entonces, en 1523, es cuando se reforma el santuario y lo empiezan a llevar dominicos y no los canónigos de la iglesia de Sta. Leocadia en Toledo, a los que les estaba a cargo hasta ese momento. Felipe II puso a los pies de la Virgen la espada de D. Juan de Austria y el estandarte turco tras la victoria en Lepanto. Felipe II la nombró "patrona de la ciudad y de todos los reinos". Este rey acudía antes y después de cada campaña a rezar en este lugar. Felipe III fue quien puso, en 1602, bajo patronato real al convento y la iglesia. Felipe IV acudió a ella en ocasiones especiales y Te Deum diversos, así como la continuó enriqueciendo. En 1643 la nombró protectora de la familia real y de la monarquía y le impuso la orden del toisón de oro a la Virgen. Desde entonces le presentaban a la Virgen todos los herederos de la corona de España. A este rey le debemos la reforma barroca de la iglesia tras el incendio de 1652. Los Borbones siguieron con esa costumbre de acudir a ella para pedir y para agradecer diversos sucesos en la historia de España, y también para ofrecer a los infantes nada más nacer. Isabel II le regaló un manto de terciopelo rojo y armiño, que todavía luce hoy en ocasiones especiales. Amadeo de Saboya lloró aquí al general Prim, Alfonso XII se trasladó a rezar aquí nada más ser restaurado en el trono y se casó en ella las dos veces. Su viuda, Mª Cristina, presentó aquí a Alfonso XIII, pero viendo el estado ruinoso del templo, mandó derribarlo para construir el nuevo, según proyecto ganador del arquitecto Arbós que no se terminó.

                            Proyecto para Basílica de Atocha de Fernando Arbós y Tremantí,
                                  que no se llegaría   a terminar ( SIEMA Matritensis)


Fachada principal de entrada al templo y
campanario (Foto SIEMA Matritensis)

Puerta de entrada a la Basílica de Atocha
(Foto SIEMA Matritensis)

Santo Domingo de Guzmán
(Foto SIEMA Matritensis)

Una gran tapia de ladrillo rojo rodea todo el complejo de la Basílica de Atocha, convento, residencia y salones. Una placa situada a la entrada nos recuerda que aquí estuvo enterrado Fray Bartolomé de las Casas (conocido como el apóstol de los Indios, por su labor desarrollada en América). Después, la escultura de Sto. Domingo preside la entrada al recinto. Este santo, después de recorrer el sur de Francia, se dió cuenta de la necesidad de formarse bien, de tener un conocimiento certero de la doctrina que se enseñaba, a la vez de un comportamiento ejemplar para poder combatir la herejía: ser muy piadosos, vivir la sobriedad y dedicar horas al estudio. No descuidando el trato a la Virgen y a la Eucaristía. Predicar era algo primordial. A la basílica le afectó todo el devenir del s XIX y XX. El día 5 de diciembre de 1808 las tropas francesas se apoderaron de la iglesia y la convirtieron en cuartel, trasladando a los monjes al convento de  Santo Tomás. Los frailes dominicos entraban y salían ,por ejemplo, tras la exclaustración de 1834. Entonces el convento pasaría a ser cuartel de inválidos y iglesia parroquia castrense. De nuevo se sucedieron las obras en el edificio hasta poder venir los dominicos en 1926. Pero les duró poco la paz, porque el 20 de julio de 1936, la iglesia fue asaltada y quemada, muriendo mártires los que habitaban el convento en esa época. Poco quedaba ya de la gran basílica barroca del s XVII.

Milagro de la Virgen de Atocha en la obras de construcción de la 
Casa de la  Villa( s XVII. Museo Municipal, Foto SIEMA Matritensis)

Basílica de Atocha antes de su destrucción en la Guerra 
Civil ( foto histórica)

La iglesia actual es de 1951. Al exterior sigue el estilo de arquitectura religiosa del Madrid de los Austrias. Una fachada con un cuerpo rectangular terminado en frontón triangular, muy sencillo. De zócalo de piedra y muros de ladrillo, con molduras barrocas en la puerta principal. La planta de la iglesia es rectangular y presenta tres naves, separadas por arcos clásicos de medio punto y pilastras de orden toscano. Una tribuna se sitúa en la diferencia de altura. La nave central presenta cubierta abovedada con arcos fajones rebajados. El altar mayor es de inspiración barroca, con forma retranqueada. En él unas molduras cóncavas nos presentan el sagrario abajo y, sobre él, dos ángeles dorados nos abren el balcón de la Virgen, con volutas barrocas, molduras y rayos, que nos muestran a la Virgen de Atocha coronada. Muy bonito el juego de puertas barrocas y balconcitos que se abre en las esquinas.

Interior de la Basílica de Atocha (Foto SIEMA Matritensis)

Vista de la cabecera (Foto SIEMA Matritensis)

Detalle del altar mayor con la Virgen 
(Foto SIEMA Matritensis)

En las naves laterales vidrieras modernas nos presentan misterios relacionados con la Vida de la Virgen y su hijo. Son de extraordinaria calidad. Todo el espacio es muy sobrio y luminoso. Apenas unas esculturas devocionales: un santo Niño más tradicional y otra de Santo Domingo de estilo contemporáneo. Por una puerta cercana a este último se puede salir a un patio antiguo con restos de claustro sin restaurar tras la Guerra Civil. También se tiene acceso a los sucesivos salones y residencia. 

Vidriera representando la Virgen de los Ángeles, la crucifixión y la 
Sagrada Familia ( Foto SIEMA Matritensis)

Vidriera de Pentecostés, la Coronación de espinas y 
el Nacimiento ( Foto SIEMA Matritensis)

Escultura de madera moderna representando a 
Sto Domingo ( Foto SIEMA Matritensis)

Santo Niño en su urna (Foto SIEMA Matritensis)

Añado una pequeña actualización. En el 2024, se ha trasladado a la Basílica de Atocha, la pila de Santo Domingo de Guzmán, donde se bautizan a todos los herederos de la corona de España y que se custodiaba en el Convento de Santo Domingo el Real (trasladado de la cuesta de Santo Domingo a la calle Claudio Coello en tiempos de Alfonso XII). Debido a que hay muy pocas vocaciones se van a fusionar las pocas monjas dominicas que quedan en otro convento y la pila ha sido trasladada a Atocha. Aquí os pongo imágenes de la misma de cuando estuvo en el convento de Claudio Coello.

                               Pila bautismal de Santo Domingo de Guzmán, enriquecida con plata
                                           (SIEMA  Matritensis)

                    Nueva capilla de Santo Domingo, con la escultura de Carmona del s XVIII y la pila
                bautismal traída del convento de Santo Domingo el Real recientemente (SIEMA Matritensis) 
                         
Saliendo hacia la parte del Panteón encontramos una pequeña tienda con información sobre la Basílica y libros y productos de los dominicos. También un mural hecho con azulejos sobre la Virgen de Atocha. Desde esta salida se ve la torre campanario que se realizó en el mismo material que los muros del panteón. Del panteón pueden ver más en la siguiente entrada: https://madridconencanto-siema.blogspot.com/2016/12/panteon-de-hombres-ilustres.html En frente los muros de la Real Fábrica de Tapices. Como ven, otro rincón con mucha historia de nuestra capital. Para cualquier información, además de comentarios en este blog, podéis contactar con la web www.siema.es, o el facebook Siema Matritensis Twitter e Instagram @siemamadencanto . Seguimos con nuestras visitas culturales, de empresa, privadas o libres individuales. 

Maribel Piqueras

Azulejo de la Basílica de Atocha (Foto SIEMA Matritensis)

Vistas desde la Basílica de la Torre Campanario del Panteón
(Foto SIEMA Matritensis)